Esta es la Promo 59 de la Comercio N°3, 5º C. Y sí, esta es la última línea que dejaremos juntos en estos pasillos. Ya no somos los mismos que entramos con la mochila llena de sueños. Ahora somos los que, con un nudo en la garganta, miramos hacia atrás y vemos una película inolvidable.
Somos los que cambiamos el uniforme por la comodidad de un terapéutico tereré en el banco de atrás, o un mate compartido mientras el sol apenas asomaba. Fuimos los reyes de la "falta de profesor", esa hora extra de oro puro para pavear en el aula, reír y andar por el patio con esa épica despreocupación que solo la secundaria te regala.
Fuimos el curso que la pasaba piola en la Estudiantina, dejando la voz y el alma en las coreografías y carrozas. Los que daban pelea en los intercolegiales, no solo por la copa, sino por la camiseta. Y claro, también fuimos los de la adrenalina de las pruebas desaprobadas que terminaba en un plan de rescate en diciembre.
El Latido Final
Ahora que los días se cuentan con los dedos, entendemos que la foto no importa; lo que vale es la huella. No nos vamos solo con un título, nos llevamos el clic de la amistad forjada en el apuro y la risa. Nos llevamos la certeza de que, aunque la puerta de la escuela se cierre, la Promo 59 no se dispersa.
Somos ese grupo que, al irse, deja una atmósfera suspendida y a sueños cumplidos. Gracias, 5º C, por ser el mejor "último año".
"No nos vamos de la escuela, nos llevamos la escuela con nosotros."